En 1940, una vez terminada la contienda, los fundadores de la empresa retomaron el proyecto y construyeron una nueva fábrica sita en Eibar en la calle Blas Echebarria, 3, con muchas dificultades, pero en un breve espacio de tiempo fueron capaces de reeditar la gama de productos y de nuevo conseguir ser líderes en el mercado nacional hasta bien entrados los años 70. Sus productos se convirtieron en auténticos iconos en las oficinas de toda España.
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.